El depósito a plazo (DAP) es una opción de inversión de muy bajo riesgo, donde el cliente puede conocer desde un principio qué rentabilidad podrá obtener al momento del vencimiento de la inversión.
Aunque parece simple, es fundamental comprender a profundidad su funcionamiento para poder beneficiarse de él. En este artículo, exploraremos qué es y cómo funciona este instrumento de ahorro, sus diferentes tipos y las monedas en que se pueden pactar.
¿Qué es un depósito a plazo?
Un depósito a plazo es una suma de dinero que entregamos a una institución financiera con el propósito de generar intereses en un período de tiempo determinado.
Al invertir en un depósito a plazo, tú decides el monto y el plazo de vencimiento del depósito, conociendo desde el principio la ganancia final que recibirás. Esta inversión sencilla y segura es ideal para aquellos que desean hacer crecer su dinero con seguridad y confianza.
Este tipo de instrumentos de ahorro están regulados por normas dictadas por el Banco Central y la Comisión para el Mercado Financiero (CMF). Según estas normativas, el plazo mínimo que se pacta para el pago de intereses y reajustes no puede ser inferior a 7 días para depósitos no reajustables (pesos chilenos, por ejemplo) o a 90 días para depósitos reajustables (como los en UF).
Tipos de depósito a plazo
Existen principalmente dos tipos de depósitos a plazo: a plazo fijo o renovable.
- Depósito a plazo fijo: En este caso, la institución financiera se obliga a pagar en un día prefijado, devengando los reajustes e intereses solo hasta esa fecha. En este caso, tú pactas el capital a invertir, el periodo y la tasa de interés. Al final del período acordado, recibirás el monto del capital invertido más los intereses ganados en el tiempo establecido.
- Depósito a plazo renovable: Tiene condiciones similares a los depósitos a plazo fijo, pero con la posibilidad de prorrogar automáticamente el depósito por un nuevo período, de la misma cantidad de días, en caso de que el depositante no retire el dinero. En los períodos siguientes, se seguirán devengando sobre el nuevo capital los intereses y reajustes correspondientes a cada período.
Monedas en que se pueden pactar
Dependiendo de tu preferencia y la oferta disponible en cada entidad financiera, podrás invertir en depósitos a plazo en las siguientes monedas o denominaciones:
- Pesos chilenos, la opción más habitual.
- Unidades de fomento (UF).
- Moneda extranjera, principalmente en dólares o euros.
¿Por qué es un instrumento de ahorro atractivo?
El depósito a plazo se considera un instrumento de ahorro atractivo por diversas razones. Primero, ofrece una rentabilidad conocida y segura, ya que sabrás desde un inicio cuánto obtendrás al llegar la fecha de vencimiento de tu inversión.
Su nivel de riesgo es bajo, lo que lo hace ideal para una estrategia de inversión. Esto es especialmente relevante si estás iniciando en el mundo de las finanzas.
Por último, optimizan el rendimiento de tu dinero y te permiten obtener más beneficios a mayor plazo, ya que entre más tiempo dure el depósito, mayores serán los intereses que obtendrás. De hecho, se ven beneficiados por el interés compuesto.