Una cuenta corriente es una cuenta bancaria que permite a un cliente depositar dinero y administrarlo a través de distintos productos como tarjetas de débito, cheques, línea de crédito, entre otros.
Por lo general, las cuentas corrientes son un producto por el cual el banco cobra una mantención u obligan a los clientes a mantenerlas con fondos o realizar transacciones.
Hasta hace algún tiempo obtener una cuenta corriente requería pasar por un proceso de evaluación por parte del banco, donde se revisaba el nivel de ingresos, deudas y riesgo del solicitante.
Sin embargo, actualmente muchos bancos han lanzado nuevas cuentas corrientes que no tienen productos de crédito asociados, lo que permite que más personas puedan abrir una. De hecho, actualmente muchas de estas cuentas se ofrecen únicamente con una tarjeta de débito, como Santander Life, ScotiaZero y la Cuenta Digital Bci.
Es importante distinguir que una cuenta corriente no es lo mismo que un plan de cuenta corriente. El segundo concepto, como pack, kit o plan, es un conjunto de productos como cuenta corriente, línea de crédito o sobregiro, chequera, tarjeta de débito y tarjeta de crédito, y que al combinar todos los productos en una sola contratación, permite acceder a menores costos de mantención o uso.
¿Cuáles son las ventajas de una cuenta corriente?
La cuenta corriente de un banco, tiene beneficios más avanzados que una cuenta vista, los cuales son:
- No tiene un tope de dinero dentro de la cuenta.
- No tiene límite de transacciones.
- Tienen una línea de crédito.
- Permiten la emisión de documentos bancarios para pagar grandes cantidades de dinero como cheques, vales vista, etc.
- Tienen giros ilimitados en cajeros automáticos
- Permiten el Pago Automático de Cuentas (PAC)
¿Cuáles son las desventajas de una cuenta corriente?
Las cuentas corrientes tienen pocas desventajas para un cliente, con respecto a la cuenta vista.
- Los bancos ponen requisitos de ingresos para obtenerla.
- Los bancos generalmente cobran comisiones por ella.
- El cliente debe ser responsable, ya que si esta es mal utilizada, el banco puede cerrar unilateralmente la cuenta e iniciar acciones de cobranza o legales en contra del titular.
¿Cuáles son las exigencias para tener una cuenta corriente?
Para abrir una cuenta corriente, los bancos deben regirse por varias normas de la Comisión del Mercado Financiero (CMF), algunas de las cuales son:
- Tener la cédula de identidad vigente.
- Poder comprobar el domicilio de la persona.
- Tener los informes de solvencia del cliente, es decir, la persona debe contar con los suficientes ingresos para mantener una cuenta con dinero.
- Reunir todos los informes bancarios del cliente. Si este ha tenido problemas de deudas con un banco, lo más probable es que le rechacen la cuenta hasta que solucione todo.
- Suscribir con la persona un documento que indique todas las características de los productos que contrata.
- Registrar la firma del cliente. Si bien algunos bancos ofrecen una “cuenta corriente” a través de vías digitales, la CMF obliga a las instituciones a tener la firma de la persona en los contratos.
