La cuenta de ahorro es el producto que permite al cliente juntar dinero, muchas veces con fines específicos.
Existen varios tipos de cuentas de ahorro. Dependiendo de sus objetivos, el cliente puede obtener beneficios como intereses mensuales, anuales y reajustes por los montos.
Antiguamente eran conocidas como libretas de ahorro, ya que la forma en que la gente mantenía registro de su cuenta era a través de un pequeño cuadernillo que era actualizado cada vez que un cliente iba a la caja del banco a depositar dinero.
Sin embargo, actualmente funcionan de forma digital. Los clientes pueden administrarla a través del sitio web o aplicación móvil de la entidad financiera, pudiendo en ocasiones obtener incluso una tarjeta de débito para realizar giros desde cajeros automáticos.
Tipos de cuentas de ahorro
Las cuentas de ahorro más comunes son:
- Hipotecarias: La cuenta de ahorro hipotecaria permite a un cliente ahorrar para la compra de un inmueble. El ahorro puede ser en pesos o en UF.
- Universitaria: Permite ahorrar con el fin de pagar una carrera universitaria.
- A la vista: Permiten depósitos con fines generales, tiene plazo indefinido y sus giros son muy regulados.
- Cuenta de ahorro para niños: Enfocada en el ahorro para niños. Tiene como titular a un adulto (padre, madre o tutor) pero estar a nombre de un niño. Cuando este cumpla la mayoría de edad, podrá girar el dinero.
Giros de dinero
Actualmente, muchas cuentas de ahorro tienen asociada una tarjeta de débito para girar dinero y hacer compras.
Este tipo de transacciones quedan reguladas a través del contrato con la institución, que también implican cobros por transacción y la pérdida de intereses y reajustes.